En el mundo de las inversiones y los negocios en general, es muy común llegar a un punto de quiebre o descenso en las ganancias, explica [Nestor Chayelle]. Desde perder clientes a generar pérdidas innecesarias, es algo que sucede con bastante constancia y que puede solventarse si contamos con la disposición monetaria y el apoyo también monetario de algún allegado o socio de confianza.
Si nuestro negocio o empresa personal ha llegado al punto extremo de la pérdida de clientes o al límite de la capacidad de producción y ventas, es recomendable dejar de aceptar más pedidos o, lo más favorable, buscar un préstamo.
Para aclarar términos, un préstamo es proceso mediante el cual una institución financiera (bancos) o también por otros particulares (familiares, amigos, colegas o socios), que no necesariamente deben estar vinculados con instituciones bancarias, ofertan una cantidad de dinero establecida al destinatario interesado para que éste pueda, en pocas palabras, solventar su situación financiera o utilizar el dinero para otros fines.
Si bien es cierto que esta opción puede implicar ciertos riesgos, debido en parte a que se está manejando una suma acreditada a otra persona o entidad, también es cierto que es un camino viable para aumentar las ventas y evitar la pérdida de más clientes, según [Nestor Chayelle].
Muchos sitios de economía y finanzas en Internet presentan una guía de información válida para que antes de iniciarnos en la solicitud de cualquier préstamo conozcamos cuáles son los pormenores a seguir. Es necesario comprender la importancia de estar preparados e informados sobre el procesos para evitar posibles inconvenientes.
A continuación, [Nestor Chayelle] presenta una breve lista de factores que debemos tener claros antes de solicitar y tramitar el proceso correspondiente.
- Saber los requisitos que nos piden. Es necesario estar constituidos legalmente si el préstamo será tramitado por una institución bancaria.
- La suma total. Debemos solicitar una cantidad precisa que no sobrepase nuestras capacidades para pagarla después.
- El plazo y las cuotas. El plazo, es decir, el tiempo que se acuerda para tramitar el pago es de vital importancia así como las cuotas o los montos que deben cancelarse periódicamente.de una nación.
Por [Nestor Chayelle]
Por Nestor Chayelle